Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.                Jeremías 31:3

Antes de que Dios comenzara el tiempo, el Creador Soberano de todo lo que existe y va a existir, sabía que tú existirías y que él te amaría.  Y cuando, en el propósito y plan de Dios, el tiempo llego para que tú existieras, El te creo a su imagen: única entre sus creaciones.

El te creó con el conocimiento del bien y el mal, para que tú escogieras voluntariamente hacer bien. El deseo de Dios cuando te creó era que tú voluntariamente escogieras amarlo y tener una relación especial con El: mostrando tu amor (hacia El) al obedecerlo.  Pero… tú no has hecho esto. Tú, como el resto del mundo, has escogido el pecado en vez; has escogido desobedecer los mandamientos de Dios, y así destruyendo tu relación con El y poniéndote debajo de Su juicio.  Y en juicio no hay esperanza.  Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios… la paga del pecado es muerte.

Tú has pecado contra el Dios Soberano.  Tú vas a enfrentar juicio. Y tú vas a ser encontrado culpable (porque tú eres culpable).

Ninguna cantidad de acciones buenas (rectas) de tu parte pueden remover la culpabilidad por las cosas malas que has hecho; la justicia demanda que el juez considere solo las leyes que has quebrado. ¿El veredicto? Culpable.   ¿La sentencia? Muerte espiritual, esto es: separación completa de Dios y sus bendiciones por la eternidad en el infierno, un lugar de tormento eterno, sin esperanza de restauración.  Tu mente grita contra esto, pero en el fondo de tu corazón, tú sabes que esto es verdadero y merecido.

Pero Dios en su amor, ha continuado su fidelidad contigo.  El ha provisto una forma por la cual tu puedes recibir misericordia en vez de juicio, remplazando desesperanza por esperanza.

¿De qué manera?  Jesucristo.  Jesús, Dios en forma humana, vino a esta tierra y vivió como un hombre.  Cuando fue tentado a hacer el mal, Él voluntariamente escogió no pecar; y Él se volvió el sacrificio perfecto por nuestros pecados.  Muriendo en la cruz, Él satisfizo la justicia de Dios; haciendo el perdón de los pecados disponible para ti.  Enterrado tres días, luego levantándose de los muertos, Jesús nos da esperanza para una eternidad con Dios en el Cielo.  Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

El perdón de Dios, resultando en misericordia, una nueva relación con Dios, y esperanza para la eternidad – todas estas cosas – están disponibles para ti hoy.  ¿Crees que Jesús murió por tus pecados, fue sepultado, y se levanto de entre los muertos?  ¿Estás dispuesto para pedirle a Dios perdón por tus pecados?  ¿Te comprometerías a dejar de vivir a tu manera y comenzar a vivir a la manera en que Dios quiere que vivas?

¿Recibirías a Jesús, Señor de la Creación, como el Señor de tu vida?  Si tu respuesta es, “si”, dile a Jesús en oración; no hay una forma específica pero esta es una oración modelo:

 “Señor Jesús,

Yo confeso que soy un pecador.  Yo creo en mi corazón de que Tú moriste por mis pecados para que yo pudiera recibir perdón.  Yo creo que Tú te levantaste de los muertos para darme esperanza.  Te pido que me perdones mientras yo cambio mi forma de vivir.  Yo quiero que seas el Señor de mi vida.  Por favor entra en mi vida y en mi corazón y toma control de mi vida. Gracias por amarme y dar tu vida para salvarme.

Amén.”

Si haz orado esta oración para recibir a Jesús como tu Señor y Salvador, sería un privilegio para mi ayudarte en lo que sigue en tu nuevo caminar con Dios.

 

The above tract is 2.75″W x 4.25″ H.   Scripture references are included as footnotes.  When folded, Acts 4:12 is displayed on the back.  Call of Grace Ministries is printed at the bottom of the decision page along with our contact information.  

2017 Call of Grace Ministries